Cada 17 de mayo se conmemora el Día Internacional de la Hipertensión. Y bien vale esta fecha para recordarles qué hacer para controlar esta enfermedad que afecta la salud de cerca del 35% de los mexicanos.
En condiciones normales todos tenemos una presión arterial que nos caracteriza y que varía dentro de ciertos límites. Cuando la presión está elevada en forma persistente es cuando se presenta la hipertensión arterial.
Pero, ¿Qué es la presión arterial? La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias. Cada vez que el corazón late, bombea sangre hacia las arterias, ahora bien la presión tiene dos componentes, la presión sistólica o máxima y la presión diastólica o mínima. Cuando nos informan el valor de presión, siempre se dice primero la máxima y luego la mínima.
Ahora, ¿cuáles son los valores normales de la presión arterial? Se considera normal una presión a 130/90 aunque el valor "óptimo" es de 120/80 o menos.
En personas mayores de 65 años es frecuente detectar una presión máxima elevada con una presión mínima normal, pero esto no es una condición normal y de hecho constituye un factor de riesgo de enfermedad y muerte. Hoy sabemos que la presión en los ancianos, al igual que en los adultos más jóvenes, no debe ser mayor a 140/90.
La presión arterial no es un valor que siempre esté fijo, de hecho cambia cada que nuestro corazón late, estas variaciones son normales, pero deben mantenerse dentro de ciertos límites, ya que un excesivo aumento de la misma se asocia a un mayor riesgo de enfermedad y muerte cardiovascular. En el transcurso del día la presión varía, ya que es más elevada durante las horas que estamos activos y baja durante el sueño.
Si nuestro médico comprueba que la presión se encuentra elevada, se requerirán de otros estudios para evaluar nuestro estado de salud y el potencial daño provocado por la hipertensión.
Es necesario considerar que un registro correcto de la presión arterial debe cumplir:
- La presión debe tomarse sentado, con la espalda derecha y los pies apoyando sobre el suelo, sin cruzar las piernas.
- El brazo en el que se realice el registro debe estar descubierto y a la altura aproximada del corazón, apoyado sobre una superficie plana.
- El brazalete debe ser del tamaño adecuado para el diámetro de nuestro brazo (los pacientes con sobrepeso u obesidad pueden requerir brazaletes más grandes) y debe colocarse a una distancia aproximada del ancho de dos dedos por encima del pliegue del codo.
- Antes de comenzar a tomar la presión, se debe guardar reposo de aproximadamente 5 minutos. Se recomienda no beber café o fumar en los 30 minutos previos a la medición.
- Se recomienda realizar un mínimo de dos registros de presión por vez. Mientras se realizan las mediciones no debemos hablar ya que puede aumentar los valores de presión arterial.
La comprobación de un registro aislado de presión arterial elevada no es diagnóstico de hipertensión arterial, se requiere de dos o tres registros elevados en diferentes ocasiones para poder decir que alguien es hipertenso. Ante un valor elevado de presión arterial se recomienda repetir el mismo en el transcurso de la semana y consultar al médico de cuidados primarios en caso de que los valores elevados se vuelvan a repetir.
Prevenir la hipertensión arterial: acudir periódicamente con nuestro médico de cuidados primarios a toma de la presión y contribuir a su control: ejercicio físico, dieta sin sal, mantenimiento de un peso corporal adecuado, abandono del tabaco y la limitación en la ingesta de alcohol y café son herramientas fundamentales para un adecuado control de la enfermedad hipertensiva. Adoptar estos hábitos saludables puede detener el aumento de este padecimiento en nuestra sociedad.
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