Los propósitos de año nuevo son metas que las personas hacemos durante las fiestas de año nuevo para intentar mejorar de alguna forma en el próximo año. En diversas ocasiones, a muchos se nos puede dificultar lograrlos. Por esta razón recomendamos estos pasos que nos ayudarán a cumplir nuestras metas propuestas.
1) Realizar una lluvia de ideas de los cambios que queremos hacer
Puede ser de cualquier cosa, como bajar de peso o dejar de fumar, consideremos como mejorar nuestra salud, la relación con los demás o en nuestra vida laboral. Procuremos anotar todos los propósitos que se nos vengan a la mente. Observemos la lista y reflexionemos que las metas sean específicas, medibles, alcanzables, gratificantes y evaluables para que se pueda ver el progreso durante el proceso.
2) Elegir una o dos grandes metas y preparémonos para empezar
Repasemos nuestra lista y elijamos el de mayor significado para cada uno, para posteriormente descomponer la meta en pequeñas acciones que se puedan ejecutar con más facilidad. Por ejemplo, si queremos bajar de peso, comencemos por aumentar el consumo de frutas y verduras, después por disminuir refrescos y alimentos fritos para posteriormente iniciar a caminar 10 minutos al día.
3) Contémosle a los demás
Discutir nuestras metas y razones con familiares y amigos, con el objetivo de que los demás nos ayuden a lograrlas.
4) Guardemos los propósitos y establezcamos un programa
Realicemos un programa o calendario con los objetivos del día y guardémoslo en la computadora y/o celular. Cada día debemos escribir lo que haremos ese día y a qué hora. Por ejemplo, escribir lo que comeremos y cuando ejercicio.
5) Empecemos a seguir un plan inmediatamente
No esperemos a sentirnos inspirados, iniciemos de una vez. Lo mejor que se puede hacer es iniciar el 1ero de enero y comencemos a rastrear el progreso. Demos un paso a la vez y sintámonos contentos con el progreso, hay que palomear cada paso con orgullo a medida que lo cumplamos. La única manera de llegar al final es empezar.
6) Establezcamos un ambiente favorable
Deshagámonos de los hábitos que interfieran con las metas y que no contribuyan a alcanzarlas. Por ejemplo, dejemos de fumar y no consumamos alcohol en exceso ya que estos hábitos son un obstáculo en la nueva rutina.
7) Recompénsate a ti mismo
Determinemos cuál será nuestra recompensa para cada pequeño logro. Procuremos tener recompensas pequeñas y frecuentes, con la espera de un gran premio al cumplir la meta final.
8) Pensemos en los logros
En cada periodo de desánimo, tengamos fe de que persistir traerá recompensas en el largo plazo. Pensemos que cada minuto se acerca cada vez más a la meta.
9) Si tenemos un desliz, iniciemos de nuevo
Todos nos podemos enfrentar a factores estresantes y eventos externos que nos pueden alejar de las metas. Las excusas son una manera de disfrazar el temor. Utilicemos el lunes para reorganizar y empezar de nuevo.
10) Mantener un registro
Mantengamos un diario para registrar al menos una cosa por la que estamos agradecidos cada día. Hay que considerar los momentos memorables del día.
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